Una vez más —la tercera— les traemos esta colección de textos, colección de lecturas, mundos que acaso reconozcan de otros pasatiempos, cuentillos que alguna vez hayan leído o referencias a «medios audiovisuales modernos»: acompañar a superhéroes adolescentes en sus más titanescas batallas internas, dialogar sobre el amor con el estratega-anti-sofismas-de-hombros-anchos más famoso, o leer -casualmente y sin malicia- sobre la vida amorosa de un Escritor Enorme (sic).
Cualquier parecido con una infracción a los derechos de… ¿Dios? es, por motivos legales, incidental y no sistémico. ¿Qué nos queda? El mundo en su totalidad, del cual hemos decidido compartirles una fracción, un fragmento. Si nuestro tercer número está dedicado al fanfic, es porque aún no hemos renunciado a la búsqueda de lo que hace a los mitos, al amor y a la palabra.
Para eso los seguimos invitando a nuestra mesa de diálogo y tallereo, de lectura y escritura; y seguir compartiendo esta revistilla que es de ustedes, por ustedes y para ustedes. Ah, y también es nuestra.
Atte. Farol