Me sent铆 triste ahora. Las orqu铆deas se hab铆an marchitado en tus recuerdos. Sin prisa, sin angustia, te has ido. Le铆 tus cartas fr铆as; en los ventanales de nuestra habitaci贸n agonizo sin ti. Mi coraz贸n sin latidos y el canto de los turpiales entonaron nuestros d铆as del ayer. Me amaste, siempre lo supe. Me dejaste porque las caricias se han quebrado. Tu ausencia se llev贸 mi vida en promesas fallidas.